En un movimiento que sacude el mundo del narcotráfico, Ovidio Guzmán López, conocido como “El Ratón” e hijo del infame Joaquín “El Chapo” Guzmán, ha decidido declararse culpable en una audiencia en Chicago. Este paso marca un punto crítico en su proceso judicial en Estados Unidos, donde enfrenta graves acusaciones por tráfico de drogas y crimen organizado.
Guzmán López, extraditado a Estados Unidos en septiembre de 2023, había mantenido una postura de “no culpable” desde su primera comparecencia. Sin embargo, en una audiencia reciente ante la jueza Sharon Johnson Coleman, su defensa, liderada por el reconocido abogado Jeffrey Lichtman, confirmó que negocia un acuerdo de culpabilidad con la fiscalía estadounidense.
Las acusaciones contra Ovidio son contundentes: liderar operaciones de tráfico de cocaína, heroína, metanfetamina y marihuana, además de lavado de dinero y posesión ilegal de armas. Como uno de los líderes de “Los Chapitos”, la facción del Cártel de Sinaloa dirigida por los hijos de “El Chapo”, su papel en el crimen organizado ha sido ampliamente documentado por las autoridades.
El acuerdo de culpabilidad podría significar una sentencia reducida para Guzmán, a cambio de colaborar con las autoridades estadounidenses. Fuentes cercanas al caso sugieren que tanto Ovidio como su hermano Joaquín Guzmán López buscan evitar un juicio prolongado, que podría resultar en cadena perpetua debido a la gravedad de los cargos.
La detención de Ovidio en Culiacán, Sinaloa, en enero de 2023, desató una ola de violencia conocida como “Los Culiacanazos”. Su captura, seguida de balaceras y narcobloqueos, evidenció el poder del Cártel de Sinaloa y la fragilidad de la seguridad en la región, un problema que sigue sin resolverse.
La extradición de Guzmán López, realizada en un operativo sigiloso, fue celebrada por el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, como un avance en la lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, la violencia ligada al tráfico de fentanilo, en la que Ovidio está implicado, continúa siendo una crisis que afecta a ambos lados de la frontera.
El abogado Jeffrey Lichtman, quien también defendió a “El Chapo”, ha manejado el caso con discreción, pero confirmó que las negociaciones están en curso. La próxima audiencia, programada para el 7 de enero de 2025, podría aclarar los términos del acuerdo y el futuro de Guzmán en el sistema judicial estadounidense.
Este caso no solo pone en el reflector a Ovidio Guzmán, sino también a la red de poder del Cártel de Sinaloa. La colaboración de “El Ratón” podría revelar información clave sobre las operaciones de la organización, incluyendo detalles sobre otros líderes como Ismael “El Mayo” Zambada.
Mientras tanto, en México, la noticia reaviva el debate sobre la efectividad de las estrategias de seguridad. La captura de figuras como Guzmán no ha frenado la violencia ni el flujo de drogas, dejando en evidencia los retos que enfrenta el país en el combate al crimen organizado.
El destino de Ovidio Guzmán sigue siendo incierto, pero su decisión de declararse culpable marca un capítulo más en la saga de uno de los cárteles más poderosos del mundo. Los ojos de México y Estados Unidos estarán puestos en Chicago, donde se definirá el futuro de “El Ratón”.