Saúl “Canelo” Álvarez volvió a brillar en el ring, y esta vez su victoria en Arabia Saudita tuvo un espectador de lujo: Fernando Hierro, exdirectivo del Club Deportivo Guadalajara. El español, conocido por su trayectoria en el fútbol, se dejó ver en la ANB Arena de Riad, disfrutando del espectáculo boxístico que consolidó al mexicano como uno de los mejores libra por libra del mundo.
La pelea, que enfrentó a Canelo contra el cubano William Scull, fue el plato fuerte de la velada organizada por Riyadh Season. Álvarez, con su característico estilo, dominó el combate y se llevó la victoria por decisión unánime, arrebatándole el invicto a su rival. Con este triunfo, el jalisciense recuperó el trono absoluto de los supermedianos, defendiendo sus títulos del CMB, AMB y OMB, además de conquistar el cinturón FIB que ostentaba Scull.
Fernando Hierro, quien ahora trabaja como directivo en el fútbol saudí, no pasó desapercibido. Captado por las cámaras de TV Azteca, el exjugador del Real Madrid expresó su admiración por el evento. “Aproveché la visita de un amigo para venir a ver la pelea, es una satisfacción estar en un evento de esta magnitud”, comentó, aunque admitió que el boxeo no es su fuerte. Su presencia añadió un toque especial a la noche, conectando el mundo del fútbol con el del pugilismo.
El combate, pactado a 12 rounds en la división de los supermedianos, mostró a un Canelo en gran forma. A pesar de que Scull intentó mantenerse en la pelea con un estilo defensivo, el mexicano impuso su experiencia y pegada. Los jueces no dudaron en darle la victoria, consolidando su legado como uno de los grandes del boxeo actual.
Hierro, por su parte, destacó la calidad de los eventos deportivos en Arabia Saudita. “Es una suerte tener este tipo de espectáculos, se nota la visión de traer los mejores deportes y eventos al país”, señaló. Su comentario refleja el creciente interés del reino por posicionarse como un epicentro de competencias internacionales, desde el fútbol hasta el boxeo.
La velada no solo tuvo a Canelo como protagonista. En la cartelera, el mexicano Jaime Munguía buscó revancha ante el francés Bruno Surace, mientras que el medallista olímpico Marco Verde debutó como profesional frente a Michel Polina. Estos combates complementaron una noche llena de emociones para los aficionados al boxeo.
Para Canelo, este triunfo marca un paso más en su carrera rumbo a nuevos retos. Rumores apuntan a que su próximo objetivo podría ser Terence Crawford, en una pelea que promete ser histórica. Mientras tanto, Álvarez sigue demostrando por qué es una figura indiscutible en el deporte mexicano.
La presencia de Hierro en el evento no solo sorprendió a los fans, sino que también sirvió como un puente entre dos deportes que apasionan a millones. Su asistencia reafirma la relevancia global de Canelo, capaz de atraer a personalidades de distintas disciplinas a sus peleas.
Con esta victoria, Canelo Álvarez no solo celebró un nuevo capítulo en su carrera, sino que también puso el nombre de México en alto. La ANB Arena vibró con cada golpe, y el público, incluyendo a Fernando Hierro, fue testigo de una noche que quedará en la memoria de los amantes del boxeo.