Un momento de celebración en el PNC Park de Pittsburgh se convirtió en tragedia el pasado miércoles. Durante el partido entre los Piratas de Pittsburgh y los Cachorros de Chicago, un aficionado cayó desde una altura de más de seis metros. El incidente ocurrió en la séptima entrada, cuando el estadio vibraba por un batazo clave.
El fanático, cuya identidad no ha sido revelada, se encontraba en la zona conocida como el Muro Clemente. Esta área, ubicada en el jardín derecho, tiene una altura de 21 pies en honor al legendario Roberto Clemente. Según testigos, el hombre parecía estar celebrando un doble de dos carreras de Andrew McCutchen cuando perdió el equilibrio.
El impacto de la caída fue devastador. El aficionado aterrizó en la franja de advertencia del campo, quedando inmóvil. Los jugadores, al percatarse de la situación, comenzaron a señalar frenéticamente hacia las gradas. Tanto el mánager de los Piratas, Derek Shelton, como el de los Cachorros, Craig Counsell, alertaron a los árbitros de inmediato.
El juego se detuvo por varios minutos mientras el personal médico atendía al hombre. Miembros de los equipos de entrenamiento de ambos clubes, junto con el personal del estadio, trabajaron rápidamente. Tras unos cinco minutos, el aficionado fue inmovilizado y retirado del campo en un carrito médico.
El hombre fue trasladado de urgencia al Hospital General de Allegheny, donde permanece en estado crítico. Las autoridades de Pittsburgh han iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias del incidente. Por el momento, se considera un accidente, pero no se han revelado más detalles.
Videos del momento, captados por asistentes y difundidos en redes sociales, muestran la gravedad de la caída. Las imágenes han generado conmoción entre los aficionados. Algunos jugadores, visiblemente afectados, fueron vistos rezando mientras el hombre recibía atención.
Andrew McCutchen, figura clave en el juego, expresó su consternación tras el incidente. En una publicación en redes sociales, el jardinero escribió que no podía dejar de pensar en el aficionado y su familia. También pidió a los seguidores unirse en oraciones por su recuperación.
El equipo de los Piratas emitió un comunicado oficial. En él, confirmaron que el aficionado fue llevado al centro de traumatología del hospital. Además, expresaron que sus pensamientos están con él y sus seres queridos durante este difícil momento.
Este incidente ha reavivado el debate sobre la seguridad en los estadios de béisbol. Casos similares en el pasado, como caídas fatales en los estadios de los Braves y los Rangers, llevaron a revisiones de las barandillas. Por ahora, los Piratas no han anunciado medidas específicas tras lo ocurrido.
La comunidad beisbolera sigue en vilo, esperando noticias sobre el estado del aficionado. El impacto emocional del suceso resonó tanto en los jugadores como en los asistentes al PNC Park. El juego, que terminó con una victoria de 4-3 para los Piratas, quedó opacado por la tragedia.