En un operativo en Tonalá, Jalisco, la policía capturó a tres individuos armados hasta los dientes y con presunta droga. El hallazgo pone en evidencia, una vez más, la escalada de violencia que azota la región.
Los hechos ocurrieron en la colonia Jardines de la Paz, donde elementos de la Fuerza Interinstitucional Regional realizaban un recorrido de vigilancia. Los oficiales detectaron a tres sujetos en actitud sospechosa a bordo de un vehículo.
Al marcarles el alto, los uniformados encontraron un fusil de asalto, una pistola y varias dosis de presunta droga en posesión de los detenidos. La situación escaló cuando se descubrió que uno de ellos tenía una orden de aprehensión vigente por homicidio.
El sujeto buscado, identificado como Luis Alberto “N”, de 29 años, era requerido por autoridades de Jalisco por su presunta participación en un asesinato. Este hallazgo resalta la impunidad que parece reinar en las calles.
Los otros dos detenidos, Juan Carlos “N”, de 31 años, y Miguel Ángel “N”, de 27, también enfrentarán cargos por portación de arma de fuego y delitos contra la salud. Los tres fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la República.
El decomiso incluyó un rifle AK-47, una pistola calibre .9 milímetros y múltiples envoltorios con sustancias ilícitas, presuntamente cristal y cocaína. Este tipo de aseguramientos refleja la grave crisis de seguridad en el estado.
La captura se suma a una larga lista de incidentes violentos en Tonalá, un municipio que parece atrapado en una espiral de delincuencia. La falta de estrategias efectivas para combatir el crimen sigue siendo evidente.
Mientras las autoridades celebran el operativo, la ciudadanía se pregunta cuándo habrá soluciones reales para frenar la inseguridad. Los habitantes de Jalisco exigen acciones concretas ante un problema que no da tregua.