El Servicio Meteorológico Nacional ha indicado que por la mañana se espera un cielo parcialmente nublado, con un ambiente fresco en las primeras horas. Sin embargo, las temperaturas mínimas oscilarán entre los 14 y 16 grados Celsius, lo que podría dar un respiro momentáneo antes de que el calor se intensifique.
Hacia la tarde, el panorama cambia drásticamente. El cielo se tornará de medio nublado a nublado, con un aumento significativo en la probabilidad de lluvias aisladas. Estas precipitaciones, que podrían alcanzar entre 0.1 y 5 milímetros, estarán acompañadas de descargas eléctricas, lo que representa un riesgo para quienes transiten en la ciudad.
El calor no dará tregua, con temperaturas máximas estimadas entre 28 y 30 grados Celsius. La combinación de altas temperaturas y la humedad derivada de las lluvias creará un ambiente bochornoso, especialmente en las zonas más urbanizadas de la capital.
El pronóstico también advierte sobre vientos provenientes del suroeste, con velocidades de 10 a 25 kilómetros por hora. Estos podrían alcanzar rachas de hasta 40 a 60 kilómetros por hora, generando tolvaneras que afecten la visibilidad y la calidad del aire en algunas alcaldías.
La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil ha recomendado a la población mantenerse hidratada y evitar la exposición prolongada al sol. Las altas temperaturas, combinadas con las lluvias, podrían generar condiciones propicias para malestares relacionados con el calor.
En el Estado de México, las condiciones serán similares, pero con un riesgo mayor de chubascos más intensos, que podrían alcanzar hasta 25 milímetros. Estas precipitaciones también vendrán acompañadas de actividad eléctrica y posible caída de granizo en algunas zonas.
Este clima inestable se da en el contexto de una onda de calor que ha afectado al centro del país durante semanas. Aunque las lluvias podrían ofrecer un alivio temporal, las autoridades advierten que las altas temperaturas persistirán en los próximos días.
La Ciudad de México, una de las urbes más pobladas del mundo, sigue enfrentando los retos del cambio climático. Fenómenos como estos, con calor extremo y lluvias repentinas, son cada vez más frecuentes, poniendo a prueba la infraestructura y la preparación de la capital.
Los capitalinos deberán estar atentos a las actualizaciones del clima, ya que las condiciones podrían variar rápidamente. Las lluvias y el calor de este 30 de abril son un recordatorio de la importancia de adaptarse a un entorno cada vez más impredecible.