El diputado priista Rubén Moreira desató la polémica al calificar la plataforma “Construyendo Justicia” como una maniobra de Morena para manipular la elección judicial del próximo 1 de junio. Según el legislador, esta iniciativa, impulsada por figuras como Alfonso Ramírez Cuéllar y Raúl Morón, no busca promover la participación ciudadana, sino controlar el proceso electoral del Poder Judicial.
Moreira acusó a Morena de engañar a la población con promesas de una justicia más democrática. Afirmó que los ciudadanos no tendrán un papel real en la selección de jueces, magistrados y ministros, ya que los candidatos ya habrían sido preseleccionados por el oficialismo. Para el priista, esto convierte la elección en una “farsa política” que pone en riesgo la independencia del Poder Judicial.
La plataforma “Construyendo Justicia” fue presentada como una herramienta para informar y fomentar el voto en la elección judicial. Sin embargo, críticos como Moreira sostienen que es una estrategia para legitimar un proceso lleno de irregularidades. El diputado señaló que Morena busca imponer candidatos afines a su proyecto político, debilitando la imparcialidad de los juzgadores.
El proceso de selección ha sido cuestionado desde su inicio. La insaculación, un sorteo para elegir candidatos, fue defendida por Morena como un método transparente, pero opositores lo ven como una forma de eliminar la meritocracia. Moreira destacó que este mecanismo no garantiza que los más capacitados lleguen a los cargos judiciales, sino aquellos con conexiones políticas.
Otro punto de controversia es la participación de figuras cercanas a Morena en la promoción de la plataforma. Ramírez Cuéllar, exdirigente del partido, y Morón, senador morenista, han encabezado eventos para incentivar la participación, lo que la oposición interpreta como una intervención indebida. Moreira advirtió que estas acciones podrían violar las normas electorales.
El Instituto Nacional Electoral aún no ha recibido denuncias formales sobre “Construyendo Justicia”, pero la oposición ya exige una investigación. Legisladores del PRI, PAN y Movimiento Ciudadano han cerrado filas contra la reforma judicial, argumentando que amenaza el Estado de derecho. Para ellos, la elección del 1 de junio es un paso hacia la captura del Poder Judicial por parte del oficialismo.
En contraste, Morena defiende la reforma como una oportunidad histórica para democratizar la justicia. Sus legisladores aseguran que la elección popular de juzgadores acabará con la corrupción y el nepotismo en el sistema judicial. Sin embargo, las críticas no cesan, y la desconfianza crece entre sectores que ven en el proceso más control político que avances reales.
A un mes de la elección, el debate sobre “Construyendo Justicia” y la reforma judicial está más encendido que nunca. Mientras Morena insiste en que el pueblo decidirá, figuras como Moreira alertan sobre un supuesto plan para consolidar el poder del oficialismo. La incertidumbre sobre el futuro del Poder Judicial mantiene a la sociedad dividida.