La madrugada de este martes, un brutal ataque armado cobró la vida de dos mujeres y un hombre en la colonia Puertas de Cadereyta, en Cadereyta Jiménez, Nuevo León. Los hechos ocurrieron en el cruce de la calle Séptima con Malinche, dejando consternados a los habitantes de la zona.
Según reportes preliminares, las víctimas fueron atacadas con armas de fuego por desconocidos que abrieron fuego sin piedad. Los cuerpos quedaron tendidos en la vía pública, evidenciando la violencia del suceso. Hasta el momento, las autoridades no han identificado a las víctimas.
Elementos de la policía municipal acudieron al lugar tras recibir reportes de detonaciones. Al llegar, confirmaron la presencia de los tres cuerpos sin vida, todos con múltiples impactos de bala. La escena fue acordonada para iniciar las investigaciones.
Agentes de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) y peritos de la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León se desplegaron en la zona. Su objetivo es recolectar evidencias que permitan esclarecer los motivos del ataque y dar con los responsables.
Vecinos de la colonia Puertas de Cadereyta expresaron su miedo y preocupación. Este tipo de hechos violentos, aseguran, reflejan la creciente inseguridad que azota al municipio y a todo Nuevo León.
El triple homicidio se suma a una ola de violencia que no da tregua en la entidad. En las últimas semanas, Cadereyta ha sido escenario de diversos crímenes, incluyendo feminicidios y ejecuciones, sin que se perciba una respuesta efectiva de las autoridades.
La Fiscalía no ha emitido información sobre posibles sospechosos o líneas de investigación. Sin embargo, se espera que las indagatorias avancen con el análisis de cámaras de seguridad y testimonios de testigos en la zona.
Este nuevo episodio de violencia pone en entredicho las estrategias de seguridad en Nuevo León. La ciudadanía exige acciones concretas para frenar la delincuencia y garantizar la tranquilidad de las familias.
Mientras tanto, la comunidad de Cadereyta llora la pérdida de tres vidas más. La incertidumbre y el temor se apoderan de las calles, donde la paz parece cada vez más lejana.