El exbanquero central Mark Carney ha tomado las riendas de Canadá como nuevo primer ministro, tras ser elegido líder del Partido Liberal. Su llegada al poder se produce en un momento crítico para el país, con retos económicos y tensiones internacionales en el horizonte.
Carney, quien reemplaza a Justin Trudeau tras su renuncia, prometió gobernar en minoría con un enfoque inclusivo. En su primer discurso tras las elecciones legislativas, aseguró que trabajará con todos los partidos políticos, territorios y la sociedad civil para fortalecer la unidad del país.
El nuevo primer ministro enfrenta una crisis en el costo de vida, especialmente en el acceso a la vivienda, un problema que ha golpeado a los canadienses en los últimos años. Carney ha reconocido la urgencia de abordar esta situación para aliviar la presión sobre las familias.
En el ámbito internacional, Canadá se prepara para una posible guerra comercial con Estados Unidos. El presidente estadounidense Donald Trump ha amenazado con imponer aranceles del 25% a los productos canadienses, lo que podría afectar gravemente la economía del país.
Carney también respondió a las provocaciones de Trump, quien ha insinuado la posibilidad de anexar Canadá como el estado 51 de Estados Unidos. Con firmeza, el primer ministro afirmó que no permitirá que tales declaraciones debiliten la soberanía canadiense.
Con una trayectoria destacada, Carney cuenta con experiencia como gobernador del Banco de Canadá y del Banco de Inglaterra. Su formación en economía en Harvard y Oxford, junto con su paso por Goldman Sachs, lo posiciona como un líder con un profundo conocimiento de los sistemas financieros globales.
Sin embargo, su llegada al poder no está exenta de desafíos. Carney será el segundo primer ministro en la historia de Canadá en asumir el cargo sin un escaño en el Parlamento, lo que lo obliga a competir pronto por un puesto en las elecciones federales.
El nuevo líder liberal ha anunciado que planea convocar elecciones generales en el corto plazo. Su objetivo es consolidar su mandato y enfrentar los retos internos y externos con un gobierno fortalecido.
Expertos destacan que la experiencia de Carney será clave para navegar las turbulentas aguas de la política internacional. Su capacidad para negociar con socios comerciales y mantener la estabilidad económica será puesta a prueba en los próximos meses.
Canadá observa con atención los primeros pasos de Carney, quien busca marcar un nuevo capítulo en la historia del país con un liderazgo basado en la cooperación y la resiliencia frente a las adversidades.