La Federación Mexicana de Futbol anunció una sanción drástica contra una jugadora de Mazatlán Femenil, quien fue suspendida por seis años de toda actividad relacionada con el futbol profesional. La decisión se tomó tras una investigación que reveló su presunta participación en la manipulación de un partido durante el Torneo Clausura 2025.
El caso comenzó a principios de abril, cuando la Comisión Disciplinaria de la FMF abrió una investigación contra varias jugadoras del club por posibles violaciones al Código de Ética. Las sospechas apuntaban a un supuesto amaño de partidos relacionado con apuestas deportivas, un problema que ha sacudido al futbol mexicano en los últimos meses.
Entre las pruebas presentadas se encuentran audios, videos y mensajes que sugieren un arreglo para alterar el resultado de un encuentro contra Chivas, disputado el 2 de febrero. En ese partido, Mazatlán Femenil perdió 8-0, un marcador que levantó sospechas por su abultada diferencia.
La investigación señaló que una casa de apuestas europea detectó movimientos inusuales, con sumas de entre 70 y 100 mil dólares apostadas en un corto periodo de tiempo contra Mazatlán. Esto llevó a un análisis más profundo que culminó con la sanción a la jugadora, cuya identidad no ha sido revelada.
Mazatlán FC, por su parte, emitió un comunicado rechazando las acusaciones y asegurando que sus jugadoras fueron víctimas de amenazas anónimas. El club afirmó haber presentado una denuncia penal para esclarecer los hechos y defender su reputación.
El equipo femenil de Mazatlán ha tenido una temporada complicada, siendo el tercer peor equipo del Clausura 2025, con solo tres victorias y 57 goles en contra. Este escándalo agrega una sombra más sobre su desempeño deportivo.
La FMF notificará a la FIFA sobre este caso, el primero de su tipo en la primera división del futbol mexicano. Además, la federación aseguró que continuará investigando posibles irregularidades similares para garantizar la integridad de la competencia.
Este incidente se suma a otros casos recientes de amaño en divisiones inferiores del futbol mexicano, donde jugadores han recibido sanciones de hasta 16 años. La situación pone en alerta al deporte nacional y subraya la necesidad de medidas más estrictas contra las apuestas ilegales.