El Wrexham AFC, el club galés propiedad de los actores Ryan Reynolds y Rob McElhenney, ha escrito un nuevo capítulo de ensueño al conseguir su ascenso a la Championship, la Segunda División del fútbol inglés. Este sábado, el equipo venció 2-1 al Charlton Athletic en el Racecourse Ground, asegurando su tercer ascenso consecutivo en una trayectoria que parece sacada de una película de Hollywood.
Hace apenas tres años, Wrexham languidecía en la National League, la quinta división del fútbol inglés, atrapado en el fútbol semiprofesional tras 15 años de lucha. La llegada de Reynolds y McElhenney en 2021, con una inversión inicial de 2.5 millones de dólares, marcó un punto de inflexión para el club, que ahora está a solo un paso de la Premier League, la máxima categoría del fútbol inglés.
El partido contra Charlton fue decisivo. Con el estadio lleno y la presencia de Ryan Reynolds entre los aficionados, Wrexham rompió el empate en la segunda mitad gracias a un gol clave que desató la euforia en las gradas. La victoria, combinada con una derrota de su rival directo, Wycombe Wanderers, aseguró el ascenso automático con una jornada por disputar en la League One.
Este logro no solo es deportivo, sino también económico. En la temporada 2023-2024, Wrexham reportó ingresos récord de 26.7 millones de libras, un aumento del 155% respecto al año anterior. Este crecimiento permitió al club saldar préstamos y fortalecer su plantilla con fichajes estratégicos, combinando talento joven y jugadores experimentados.
La gestión de Reynolds y McElhenney ha transformado al Wrexham en un fenómeno global. Su documental “Welcome to Wrexham”, nominado a los Emmy, ha llevado la historia del club a audiencias internacionales, mientras que patrocinios de marcas como TikTok, American Airlines y HP han elevado su perfil comercial.
Bajo la dirección técnica de Phil Parkinson, el equipo ha mostrado una consistencia notable. Jugadores como Paul Mullin, con su olfato goleador, han sido fundamentales en esta campaña. La afición, que llenó el estadio con 10,500 espectadores, celebró el ascenso con una invasión de campo, un reflejo de la pasión que este proyecto ha despertado.
El éxito del Wrexham también ha tenido un impacto en la comunidad local. La inversión de los actores ha impulsado mejoras en el Racecourse Ground, uno de los estadios más antiguos del mundo, y ha atraído la atención de nuevos inversores, como la familia Allyn de Nueva York, que adquirió una participación minoritaria en 2024.
Este ascenso coloca al Wrexham en una posición privilegiada. La Championship, conocida por su competitividad, será un nuevo desafío, pero el club ya sueña con la Premier League. Equipos como Leicester, campeón de la Premier en 2016, serán sus rivales en la próxima temporada.
La historia del Wrexham es un testimonio de cómo la visión, la inversión y el talento pueden transformar un club modesto en un contendiente serio. Desde la quinta división hasta la antesala de la élite, los Dragones Rojos han demostrado que, con determinación, los sueños más ambiciosos pueden hacerse realidad.
Ryan Reynolds, visiblemente emocionado, ha descrito este viaje como “el paseo de su vida”. Para los aficionados del Wrexham, este ascenso no es solo un triunfo deportivo, sino la prueba de que su club, respaldado por dos estrellas de Hollywood, está destinado a seguir brillando.