Un nuevo capítulo de violencia sacude a Jalisco. En el municipio de Teocaltiche, un enfrentamiento a tiros entre policías estatales y civiles armados dejó al descubierto un presunto narcorrancho utilizado para actividades ilícitas. La balacera, que ocurrió en la madrugada, pone en evidencia la creciente inseguridad en la región de los Altos Norte, donde la delincuencia parece operar con total impunidad.
El incidente comenzó alrededor de la 1:20 de la mañana, cuando elementos de la Policía Regional patrullaban la carretera Villa Hidalgo-Teocaltiche. En el kilómetro 5, fueron atacados a balazos por un grupo de civiles armados. Los oficiales respondieron a la agresión, desencadenando una persecución que los llevó hasta un rancho conocido como Las Margaritas.
En el rancho, los policías fueron recibidos con más disparos. Tras un intenso intercambio de balas, los agresores lograron escapar, dejando atrás un escenario que revela la magnitud del problema. Las autoridades no reportaron heridos, pero el hallazgo en el lugar es alarmante: armas largas a la vista y una bodega repleta de autopartes de dudosa procedencia.
El rancho Las Margaritas, de unas cinco hectáreas, está ahora bajo resguardo mientras la Fiscalía General de la República tramita una orden de cateo. Este no es un caso aislado. En los últimos meses, Teocaltiche ha sido escenario de múltiples episodios violentos, incluyendo asesinatos y desapariciones de policías, lo que refleja un preocupante descontrol en la seguridad pública.
La región de los Altos de Jalisco vive bajo la sombra de la delincuencia organizada. Apenas el pasado 11 de abril, otro operativo en Teocaltiche permitió el aseguramiento de una bodega con armas, vehículos robados y piezas automotrices valuadas en millones de pesos. Días después, en un aparente acto de represalia, el comisario de la policía municipal fue asesinado.
Este nuevo enfrentamiento pone en tela de juicio la efectividad de las estrategias de seguridad en Jalisco. Mientras los delincuentes logran escapar, los ciudadanos viven con el temor constante de ser víctimas de la violencia. La falta de resultados concretos por parte de las autoridades alimenta la percepción de que el crimen organizado opera sin freno.
El hallazgo del narcorrancho es solo una pieza más de un rompecabezas que parece no tener fin. Las armas y autopartes encontradas sugieren que el lugar era un punto clave para actividades ilícitas, pero la ausencia de detenidos deja muchas preguntas sin respuesta. ¿Cuántos ranchos como este siguen operando en la clandestinidad?
La situación en Teocaltiche es un reflejo de los retos que enfrenta Jalisco en materia de seguridad. Los enfrentamientos armados, los asesinatos y los hallazgos de arsenales son cada vez más frecuentes, mientras la ciudadanía espera acciones contundentes. Por ahora, el rancho Las Margaritas permanece bajo investigación, pero la incertidumbre sobre lo que vendrá persiste.