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Jornada de violencia sacude Michoacán y Guanajuato con bloqueos y quema de vehículos

Una ola de violencia paralizó este miércoles varias carreteras en Michoacán, Jalisco y Guanajuato, donde grupos criminales incendiaron vehículos y bloquearon vialidades clave. Los disturbios, atribuidos al Cártel Jalisco Nueva Generación, dejaron a automovilistas varados y generaron caos en la región.
Los hechos comenzaron alrededor de las 15:00 horas, tras un presunto operativo de fuerzas federales contra el crimen organizado. En respuesta, los delincuentes quemaron camiones, autobuses y autos particulares en al menos 13 puntos de Michoacán, incluyendo Apatzingán, La Piedad, Zamora y Uruapan.
En Jalisco, la carretera México-Guadalajara fue escenario de un tráiler en llamas a la altura de Ocotlán, mientras que en Carapan se reportó otro vehículo incendiado cerca de una subestación de la Comisión Federal de Electricidad. La violencia no se limitó a las carreteras, ya que en Apatzingán dos tiendas Oxxo fueron consumidas por el fuego.
Guanajuato también sufrió las consecuencias, con al menos cuatro vehículos quemados en los municipios de Pénjamo y Abasolo. Testigos reportaron detonaciones de arma de fuego, y las autoridades locales vincularon los hechos a los disturbios en Michoacán, señalando intentos de robo por parte de los responsables.
La Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán desplegó a la Guardia Civil, el Ejército y la Guardia Nacional en regiones como Zamora, Zacapu, Apatzingán y Morelia. A pesar de los esfuerzos, los bloqueos causaron horas de retrasos y obligaron a empresas como Estafeta a suspender operaciones en varias localidades por seguridad.
Fuentes de inteligencia apuntan a que los ataques fueron una reacción directa del Cártel Jalisco Nueva Generación ante operativos federales. En algunos puntos, como el crucero El Correo-Quiroga, la Guardia Civil frustró intentos de incendiar más camiones, aunque los responsables lograron huir tras una persecución.
La violencia desatada expone, una vez más, la fragilidad de la seguridad en la región. Los habitantes de los municipios afectados recibieron recomendaciones de evitar las zonas en conflicto y, de ser posible, permanecer en sus hogares.
Hasta el momento, no se reportan víctimas fatales ni detenidos relacionados con los bloqueos. Sin embargo, las pérdidas materiales son considerables, y la incertidumbre persiste en las comunidades afectadas por esta jornada de terror.
Las autoridades de los tres estados mantienen operativos conjuntos para restablecer el orden y garantizar la seguridad en las carreteras. Los hechos de este miércoles se suman a una serie de incidentes similares en la región, donde el crimen organizado desafía constantemente a las fuerzas del orden.
La situación sigue en desarrollo, con automovilistas y residentes atentos a cualquier novedad. La falta de una estrategia efectiva para contener estas reacciones violentas continúa siendo un tema de preocupación para la población.

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