La autopista México-Cuernavaca se convirtió en un verdadero caos este Jueves Santo. Miles de vacacionistas aprovecharon el inicio del periodo vacacional de Semana Santa para salir de la Ciudad de México, saturando por completo esta importante vía rumbo a Morelos y Guerrero.
Desde las primeras horas del día, las filas de vehículos se extendieron por kilómetros. En la caseta de Tlalpan, se reportó la salida de hasta 55 automóviles por minuto, mientras que solo 15 ingresaban a la capital. La carga vehicular provocó tiempos de espera de hasta dos horas para quienes buscaban llegar a destinos turísticos como Cuernavaca o Acapulco.
Caminos y Puentes Federales informó que la saturación comenzó desde el Periférico Sur, afectando avenidas clave como Insurgentes y Viaducto Tlalpan. Los conductores enfrentaron un avance lento, con tramos prácticamente detenidos en varios puntos de la autopista.
A pesar de que se habilitaron todas las casetas disponibles, el flujo vehicular no dio tregua. Las autoridades recomendaron a los automovilistas manejar con precaución y anticipar sus traslados, pero el colapso vial fue inevitable ante la masiva afluencia.
La situación no solo afectó a los vacacionistas, sino también a los residentes de la zona sur de la Ciudad de México. Las entradas y salidas de la capital quedaron prácticamente bloqueadas, complicando la movilidad en una de las temporadas más concurridas del año.
Reportes en redes sociales mostraron la frustración de los conductores, quienes compartieron imágenes de las largas filas y el tráfico detenido. Algunos usuarios señalaron que el trayecto de la Ciudad de México a Cuernavaca, que normalmente toma una hora, se prolongó hasta tres horas.
La Guardia Nacional mantuvo un monitoreo constante en la autopista, pero no se reportaron incidentes graves durante la mañana. Sin embargo, la falta de planeación para manejar el volumen de vacacionistas volvió a evidenciar los retos de esta ruta en periodos vacacionales.
Este escenario se repite cada año en fechas como Semana Santa, cuando miles de capitalinos buscan escapar al calor de destinos turísticos. La autopista México-Cuernavaca, una de las más transitadas del país, sigue siendo un punto crítico para la movilidad en estas temporadas.