En un nuevo capítulo de la lucha contra la impunidad en la Ciudad de México, autoridades detuvieron a un hombre de 30 años en la alcaldía Xochimilco, acusado de un atroz feminicidio cometido en 2018. El crimen, que sacudió a la comunidad, dejó en evidencia la persistente ola de violencia que azota la capital.
El detenido, capturado en la colonia Tetacalanco, enfrenta cargos por el asesinato de una mujer de 60 años, agredida brutalmente en un domicilio de la misma zona donde fue arrestado. La Secretaría de Seguridad Ciudadana destacó que la detención fue posible gracias a labores de inteligencia e investigación exhaustiva.
Los hechos ocurrieron el 14 de abril de 2018, cuando la víctima fue atacada en su hogar. Según las autoridades, el agresor actuó con violencia extrema, privando de la vida a la mujer en un acto que hoy se clasifica como feminicidio, un delito que sigue siendo una herida abierta en el país.
Tras años de seguimiento, las pruebas recopiladas por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México fueron clave para acreditar la responsabilidad del sospechoso. Este caso refleja la lentitud del sistema judicial, que tardó siete años en llevar al responsable ante la justicia.
La detención se llevó a cabo en un operativo donde los agentes ubicaron al sujeto en las calles Capulín y Camino a San José. Tras confirmar su identidad, fue trasladado a un centro penitenciario, donde un juez determinará su situación legal en los próximos días.
Este arresto pone de manifiesto la alarmante situación de inseguridad en la Ciudad de México, donde los feminicidios siguen siendo una constante. Organizaciones civiles han denunciado que la falta de acción efectiva por parte del gobierno agrava esta crisis.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana reiteró su compromiso con la investigación de delitos contra las mujeres, pero la ciudadanía exige resultados concretos. Casos como este, que tardan años en resolverse, generan desconfianza en las instituciones encargadas de garantizar justicia.
Mientras el detenido espera su proceso, la sociedad mexicana continúa clamando por medidas urgentes para frenar la violencia de género. Este caso es un recordatorio de que la lucha contra los feminicidios requiere más que promesas: exige acción inmediata y efectiva.