El príncipe William sorprendió a todos al aparecer en el Parque de los Príncipes para apoyar al Aston Villa contra el PSG en los cuartos de final de la Champions League. Acompañado de su hijo George, no solo vibró con el partido, sino que se convirtió en el centro de atención al unirse a los comentaristas.
Con su característico carisma, William analizó el encuentro, destacando el gran momento del Aston Villa y el talento del PSG, especialmente del portugués Vitinha. Sus comentarios, llenos de pasión y conocimiento, dejaron a los aficionados impresionados.
A pesar del entusiasmo de William, el Aston Villa cayó 3-1 ante un PSG que dominó el encuentro. Ahora, los ingleses tendrán que remontar en casa si quieren seguir soñando en la competencia.
El partido no solo fue un espectáculo en la cancha, sino también en las gradas, con el príncipe demostrando que es un hincha más. Su presencia añadió un toque especial a una noche inolvidable de fútbol europeo.