Un fugitivo de la justicia estadounidense desató el caos en Tijuana al matar a una agente de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana durante un fallido operativo de captura.
El incidente ocurrió en el fraccionamiento Barcelona Residencial, donde las autoridades intentaban detener a César Hernández, un sujeto que escapó de una corte en California en diciembre de 2024.
Armado y sin piedad, el criminal disparó contra la agente Abigaíl Esparza Reyes, quien perdió la vida tras ser trasladada de emergencia a la Cruz Roja.
Lo más alarmante: tras el ataque, Hernández logró evadir un impresionante despliegue de policías, helicópteros y drones, dejando en evidencia la incapacidad de las autoridades para contener la violencia.
Mientras el gobierno presume supuestas bajas en los índices delictivos, este caso demuestra que la inseguridad sigue fuera de control y cobra vidas de quienes intentan enfrentarla.
La gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda lamentó el hecho, pero las palabras no devuelven la vida a la agente ni frenan a los criminales que operan con impunidad en Baja California.