Los Cincinnati Bengals han decidido poner fin al contrato de arrendamiento de su estadio, el Paycor Stadium, que expira el 30 de junio de 2026, abriendo la posibilidad de abandonar la ciudad tras más de cinco décadas.
Katie Blackburn, vicepresidenta ejecutiva del equipo, informó que el club tiene hasta el 30 de junio de 2025 para ejercer una opción de extensión por dos años, pero no hay certeza de que esto ocurra.
La directiva señaló que, de no renovar, los Bengals podrían convertirse en “agentes libres geográficos” y explorar nuevas ubicaciones para establecerse a partir de la temporada 2026.
Este anuncio ha generado incertidumbre entre los aficionados, ya que el equipo no ha detallado planes concretos, limitándose a decir que las decisiones se tomarán “a su debido tiempo”.
El Paycor Stadium, inaugurado en 2000, ha sido la casa de los Bengals desde entonces, pero las negociaciones con el condado de Hamilton, propietario del inmueble, no han avanzado favorablemente.
La posibilidad de una mudanza representa un cambio significativo para una franquicia que ha forjado su identidad en Cincinnati, donde también enfrentó momentos clave como la final de conferencia en 2022.
Por ahora, el futuro del equipo sigue en el aire, mientras la organización evalúa sus opciones dentro y fuera de la ciudad que los ha albergado desde 1968.