La inseguridad sigue rampante en el Estado de México, y esta vez la policía atrapó a dos sujetos en una escena casi cómica: vestidos en pijama, robando autopartes como si fuera su rutina nocturna.
El arresto ocurrió en Naucalpan, donde los agentes sorprendieron a estos delincuentes desmantelando un auto estacionado en plena calle. No se esforzaron mucho en ocultar su crimen, operando a la vista de todos.
Según las autoridades, los hombres, de 25 y 30 años, ya tenían un historial delictivo por robo. La captura se dio tras una llamada anónima que alertó sobre sus movimientos sospechosos en la zona.
Lo alarmante es que este tipo de delitos no para. El Estado de México sigue siendo un foco rojo para el robo de autopartes, y las autoridades parecen incapaces de frenar esta ola de violencia e inseguridad.
Los detenidos fueron puestos a disposición del Ministerio Público, pero la pregunta sigue en el aire: ¿hasta cuándo seguirán estos incidentes sin que el gobierno tome medidas serias para proteger a los ciudadanos?
La ciudadanía está harta de vivir con miedo, mientras los criminales, incluso en pijama, actúan con total impunidad en las calles.