La organización México Evalúa ha lanzado una advertencia preocupante: ocho estados de México enfrentan un riesgo elevado de violencia político-criminal rumbo a las elecciones judiciales del 1 de junio. Según su análisis, la inseguridad podría alcanzar niveles alarmantes en estas regiones.
Baja California encabeza la lista con un riesgo “muy alto”, seguida por Chihuahua, Tamaulipas, Veracruz, Tabasco, Quintana Roo, Michoacán y Colima. La ONG señala que el crimen organizado podría intentar infiltrarse en estos comicios para consolidar su poder, un peligro que pone en jaque la justicia.
Siete estados más, como Sonora, Nayarit y la Ciudad de México, están en “riesgo medio”, mientras que solo Coahuila, Durango, Aguascalientes y Yucatán se consideran de “riesgo bajo”. La falta de acción efectiva del gobierno para frenar esta amenaza es evidente y alarmante.
Por primera vez, México elegirá cargos del Poder Judicial Federal, pero la sombra del crimen organizado amenaza con sabotear el proceso. México Evalúa advierte que, sin una estrategia sólida, estas elecciones podrían convertirse en otro capítulo de violencia e impunidad.
La organización urge proteger a candidatos y regiones vulnerables, usando fuerzas menos infiltradas por el crimen. Con las campañas a punto de arrancar el 30 de marzo, el tiempo se agota para evitar que la delincuencia dicte el rumbo de la justicia en el país.