El gobierno de Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, ha suspendido sus aportaciones financieras a la Organización Mundial del Comercio (OMC). Esta decisión se enmarca en una estrategia más amplia para reducir el gasto público, según informaron fuentes oficiales este viernes.
La medida, que entró en vigor de manera inmediata, busca reevaluar el uso de los recursos federales destinados a organismos internacionales. La OMC, encargada de regular el comercio global, podría enfrentar dificultades operativas ante la ausencia de fondos provenientes de uno de sus principales contribuyentes.
Autoridades estadounidenses justificaron la pausa argumentando que es necesario priorizar el presupuesto interno en un contexto de ajustes económicos. Sin embargo, no se especificó cuánto tiempo durará esta suspensión ni el impacto exacto que tendrá en las actividades de la organización.
El anuncio ha generado incertidumbre en el ámbito internacional, especialmente entre los países que dependen de la OMC para mediar disputas comerciales. Analistas advierten que esta acción podría debilitar el sistema multilateral de comercio en un momento de tensiones económicas globales.
Por ahora, la Casa Blanca no ha detallado si planea retomar las contribuciones en el futuro o si esta decisión marca un cambio permanente en su relación con la OMC. La noticia llega en medio de otros recortes anunciados por la administración Trump, lo que refuerza su postura de austeridad fiscal.