El próximo 7 de abril, el gobierno federal, encabezado por Claudia Sheinbaum, lanzará una propuesta que promete revolucionar la escena musical mexicana. Se trata de una iniciativa que busca impulsar la música nacional, pero con un giro inesperado: eliminar todo contenido violento. Así lo anunció la presidenta en su conferencia matutina, dejando claro que el objetivo es alejar a los jóvenes de la influencia de los grupos delictivos.
La Secretaría de Cultura, en colaboración con empresarios de México y Estados Unidos, está detrás de este ambicioso proyecto. Según Sheinbaum, la idea es promover géneros musicales que no glorifiquen la violencia ni hagan apología del narcotráfico, como ocurre con los famosos narcocorridos. La propuesta surge en un contexto donde la narcocultura sigue ganando terreno entre las nuevas generaciones.
Con un tono firme, la mandataria llamó a los jóvenes a rechazar cualquier acercamiento con el crimen organizado, asegurando que “no es una opción de vida, sino de muerte”. Este mensaje se enmarca en una estrategia más amplia para combatir la inseguridad, aunque no se detalló cómo se implementará esta iniciativa ni qué tan efectiva será en un país donde la violencia sigue al alza.
El anuncio ha generado expectativa, pero también dudas. ¿Podrá el gobierno realmente cambiar los gustos musicales de millones y frenar la influencia de la delincuencia con canciones? Por ahora, la fecha está marcada: el 7 de abril se revelarán más detalles de este plan que mezcla cultura y política en un solo compás.