La Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito (Jufed) ha lanzado una advertencia contundente: las elecciones judiciales del 1 de junio podrían ser el inicio de un desastre para la justicia en México. Según la organización, este proceso no democratiza el Poder Judicial, sino que lo pone en manos de intereses oscuros y abusos de poder.
Juana Fuentes, directora de Jufed, aseguró desde Ginebra, Suiza, que participar en estas elecciones es validar un régimen autoritario que amenaza las libertades de todos. En su denuncia ante la ONU, destacó que el gobierno federal y su mayoría legislativa están detrás de un plan para controlar el sistema judicial.
La Jufed señala que el diseño de estas elecciones, impulsado por el Ejecutivo, carece de garantías y está lleno de irregularidades. Esto, dicen, abre la puerta a la manipulación y a la influencia de grupos de poder, dejando a la ciudadanía sin jueces imparciales y capacitados.
Fuentes fue clara: votar en junio no es un acto de democracia, sino un paso hacia la arbitrariedad. Criticó que el gobierno de Claudia Sheinbaum y Morena busquen desmantelar el último contrapeso institucional, poniendo en riesgo los derechos de millones de mexicanos.
La asociación insiste en que el proceso debe suspenderse de inmediato. Argumentan que, lejos de modernizar la justicia, estas elecciones consolidarán un sistema donde el poder político reine sobre la ley, algo que México no puede permitirse.