Un juez federal de Nueva York ha otorgado a Rafael Caro Quintero, conocido como el “Narco de Narcos”, un plazo de 90 días para negociar un acuerdo de culpabilidad con los fiscales de Estados Unidos. Este periodo, que concluirá el 25 de junio, podría ser decisivo para que el capo evite enfrentar la pena de muerte por el asesinato del agente de la DEA Enrique “Kiki” Camarena en 1985.
Caro Quintero, extraditado a Estados Unidos el pasado 27 de febrero, compareció este miércoles en una corte de Brooklyn. Durante la audiencia, el juez Robert M. Levy rechazó su solicitud de un juicio rápido, argumentando la complejidad del caso, que incluye cargos por narcotráfico, crimen organizado y el homicidio de Camarena.
La Fiscalía tiene hasta finales de junio para decidir si insistirá en pedir la pena capital o si aceptará un acuerdo que podría reducir la sentencia a cadena perpetua. Mientras tanto, la corte asignó a Caro Quintero una nueva abogada, Sabrina Shroff, experta en casos complejos, ante la posibilidad de que su vida esté en juego.
El capo, de 72 años, se declaró no culpable de los cuatro cargos principales en su contra. Sin embargo, su historial como fundador del Cártel de Guadalajara y las acusaciones por el brutal asesinato de Camarena lo colocan en una posición crítica frente a la justicia estadounidense.
Este plazo de 90 días representa una ventana clave para Caro Quintero. Su defensa buscará negociar con los fiscales, quienes aún no han confirmado si la pena de muerte será una carta definitiva en el juicio o una herramienta de presión para obtener información valiosa del narcotraficante.