Usha Vance, esposa del vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, tiene planeado un viaje privado a Groenlandia la próxima semana, acompañado por el consejero de Seguridad Nacional, Michael Waltz, según reportan medios daneses y groenlandeses. La visita ocurre en un momento de tensión por el interés de Donald Trump en adquirir este territorio autónomo de Dinamarca.
El itinerario incluye la asistencia de Vance a una conocida carrera de trineos tirados por perros, un evento que ha recibido apoyo económico del consulado estadounidense en Nuuk, la capital de Groenlandia. Aunque la Casa Blanca no ha confirmado la presencia de Waltz, fuentes diplomáticas citadas por el diario Jyllands-Posten aseguran que él también formará parte de la delegación.
La ministra groenlandesa de Asuntos Exteriores en funciones, Vivian Motzfeldt, confirmó el viaje de Vance, pero señaló que aún no se conocen detalles exactos sobre fechas o actividades específicas. Mientras tanto, el alcalde de Qeqqata, donde se realiza la carrera, rechazó reunirse con la esposa del vicepresidente debido a la cercanía de las elecciones municipales del 1 de abril.
Este viaje se da en un contexto delicado, tras la visita privada de Donald Trump Jr. a Nuuk en enero y las recientes manifestaciones de cientos de groenlandeses frente al consulado estadounidense. Líderes como Múte B. Egede y Jens-Frederik Nielsen, ganador de las elecciones, han expresado su oposición a las intenciones de Trump sobre la isla.
La presencia de figuras clave de la administración estadounidense en Groenlandia subraya el interés estratégico de Washington en la región, que Trump ha justificado como una necesidad de seguridad nacional, generando debate tanto en la isla como en la comunidad internacional.