La afición mexicana volvió a protagonizar un incidente durante la Final de la Concacaf Nations League contra Panamá, disputada el domingo 23 de marzo de 2025 en el SoFi Stadium. El partido, que terminó con victoria 2-1 para México, se vio interrumpido por unos minutos debido a los gritos homofóbicos dirigidos al portero panameño Orlando Mosquera.
El problema surgió en el minuto 79, cuando los seguidores lanzaron el conocido cántico en dos ocasiones en menos de 30 segundos. Aunque el árbitro guatemalteco Mario Escobar ignoró inicialmente las ofensas, tras una tercera repetición al minuto 82, decidió detener el encuentro y activar el protocolo antidiscriminación de la Concacaf.
A pesar de las advertencias emitidas por el sonido local y las pantallas del estadio, que pedían cesar el comportamiento bajo amenaza de expulsión, el grito persistió. El juego se reanudó tras una pausa de cinco minutos, pero el incidente opacó parcialmente la celebración del título mexicano, conseguido con un penal de Raúl Jiménez en el tiempo añadido.
Este episodio se suma a una larga lista de sanciones que la Selección Mexicana ha enfrentado por el mismo motivo en torneos pasados. La Federación Mexicana de Fútbol podría recibir nuevas multas o restricciones, aunque la Concacaf no ha anunciado medidas específicas hasta el momento.
El partido, que estaba empatado 1-1 hasta los minutos finales, mostró a un México dominante en el segundo tiempo. Sin embargo, la conducta de la afición revivió un problema que las autoridades deportivas han intentado erradicar sin éxito total en los últimos años.